Cartes, el peor Presidente de los últimos tiempos

Según la encuesta de opinión publicada este domingo 02 de febrero por el diario empresarial “Última Hora” (que apoya a Horacio Cartes), el mejor de los 8 últimos Presidentes de la República desde 1989 hasta la fecha (inclusive Cartes, que ganó las pasadas elecciones del 21 de abril por un 48% de los votos), fue Fernando Lugo, con un 42,8% sobre el total; un 1,7% dice que no fue ninguno y un 8,0% no sabe o no responde. Es decir, sin estas opiniones de “ninguno”, o “no sabe/no responde”, entre los que respondieron a favor de algún Presidente de la República, concluyen que en un 47,5% Fernando Lugo fue el mejor presidente de los últimos 25 años. La encuesta fue realizada por la conocida encuestadora GEO, para Asunción y su área metropolitana, en base a una muestra de 402 casos, con un nivel de confianza del 95% y un margen de error de 4,8%. Hay que acotar que Fernando Lugo es mucho más popular en el interior del país, como se registró en los últimos comicios, por lo que, si se hubiera tratado de una encuesta nacional (y no sólo de Asunción y su área metropolitana, donde se concentra apenas el 40% del electorado), es muy probable que el porcentaje a favor de Lugo, como el mejor presidente de la “democracia” (luego de la dictadura stronista), habría sido por un margen mucho mayor. Luego de Lugo, la ciudadanía entiende que el segundo mejor Presidente fue Nicanor Duarte Frutos (21,4%), exactamente la mitad de los que creen que Lugo fue el mejor Presidente (42,8%). En tercer lugar se sitúa Rodríguez (1989 – 1993), con un 15,9%. Recién después aparece Horacio Cartes, el actual Presidente, con un casi ridículo 5,0% (5,5% de respuestas válidas), luego de haber ganado la elección de hace menos de un año (abril del 2013) por un 48%. De hecho, el desprestigio de Cartes se ha extendido ampliamente desde los primeros días de su gobierno, al aplicar la Ley de Militarización, primero, la Ley de la Alianza Público Privada, después, al vetar también el impuesto a los grandes latifundistas sojeros –que casi no pagan ningún impuesto y tan sólo en el 2013 ganaron la fabulosa suma de 1.500 millones US$, unas 2/3 partes de la deuda externa paraguaya-- y contribuir, así, una reducción del consumo del país en un 5%, paradójicamente en un momento en que el país creció en un 13%, situándose en el tercer puesto mundial. La sensación de paralización de la economía es real, como lo constata la estadística citada (reducción del consumo), por lo que el enojo de la gente contra Cartes ha ido creciendo, pues sobra plata, pero no para la gente sino para el reducido grupo de agro exportadores y latifundistas. A todo ello se sumó el alza del pasaje (20%) en enero (por lo cual han habido manifestaciones diarias, un hecho insólito en pleno enero), al mismo tiempo que el salario mínimo está congelado desde hace más de 2 años y medio, se dan despidos masivos y se producen brutales represiones contra el movimiento campesino, que protesta en contra de las fumigaciones que reciben a diario, afectando gravemente a su salud y la deforestación, con un reciente asesinato (Nery Benítez, el 02 de febrero, en LUZ BELLA, a cargo de sicarios), a más de varios heridos graves. En los últimos 25 años se registraron 133 asesinatos impunes de dirigentes campesinos. Cartes apenas salió un poco mejor en la encuesta que Federico Franco (con 2,7%), uno de los ex Presidentes más odiados por la población, incluso por sus correligionarios liberales, que representan aproximadamente un 30% del electorado, pero opina que el único Presidente liberal en los últimos 25 años, Franco, fue uno de los peores Presidentes (sólo el 2,7% opina que fue el mejor). Lo grave para Cartes es que hace menos de un año había sido electo por un 48% de los votos y un poco antes de asumir, su popularidad incluso parecía haber crecido, lo que rápidamente se deterioró por las fuertes medidas represivas y neoliberales. Ahora deberá soportar un PARO CÍVICO NACIONAL del 24 al 30 de marzo y una HUELGA GENERAL el 26 de marzo, por primera vez en 18 años.