Oficialismo y Partido Colorado

Hay una inmensa diferencia entre Oficialismo y Partido Colorado, el primero es el que tiene el poder, en tanto que el segundo aporta, involuntariamente, su estructura. ¿Puede una institución tenr voluntad? La respuesta es sí, esa voluntad esta determinada en su estatuto, en la carta de fundación. Siguiendo esta línea de pensamiento se debera expulsar a todos los que forman parte de la actual comisión, si se revisa bien el estatuto se verá que tengo razón: Han perseguido correligionarios, han subvertido los valores éticos y morales del partido, con el solo fin de seguir en el poder, se han convertido en dictadores y opresores, valores absolutamente contrarios a la doctrina del Partido.

Por eso decimos:

Ha caído el oficialismo, no el Partido Colorado, han caído los que asilaron, torturaron, desaparecieron y hambrearon al pueblo paraguayo: Hoy, entre ellos mismos, se metrallan dardo de grueso calibre, salen acusaciones, que en otras circunstancia no habrían salido para nada.

Pero bueno esta hecha la desgracia y no hay mas remedio. Ahora hay que juntar los pedazos tratar de unirlos con alguna endeble cola para que de las cenizas, surja limpio y fuerte un neo coloradismo digno y actuante, desde la oposición.

Para quienes de alguna forma hemos sido victimas de los desatinos de estos Clepto-Megalomaniacos, es un alivio para el alma. No en tanto aún queda la duda, el ¿que pasará ahora? Martilla en nuestras mentes, en la mía por lo menos, cual enigma sin respuesta. Somos concientes de que no se puede esperar un milagro, por más Obispo que sea nuestro Presidente electo. No podemos arriesgarnos aún a decir larguemos todo aquí y vayemos allá, no se puede arriesgar sino hasta dentro de uno o dos años para ver las garras o la inteligencia de este nuevo gobierno, ante todo vamos con calma.

Hay que ver si habrá trabajo para todos, trabajo digno sobre todo, reglas claras para la inversión generadora de empleos, una solución definitiva para Ciudad del Este, basta de descrédito a nivel exterior contra esta linda ciudad, debe extirparse el estigma de la ciudad de la mafia de la falsificación, contrabando y los conflictos de “sacoleiros” con cierres de fronteras en forma unilateral por parte de Brasil. Basta de que nos llamen de País bananero, esta tarea no depende de una sola persona, es una tarea titánica que requiere el apoyo y el esfuerzo de todos los que amamos esa roja tierra guaraní.

¿Que sentimos los que estamos fuera de País, forzados por la situación político-económica del Paraguay?, puedo hablar de lo que yo siento difícil hablar de los otros, solo sé que hay entre todos, un punto en común: a todos nos gustaría volver al Paraguay, pero cada uno tiene razones diferentes para no hacerlo, desde el “yo aquí ya tengo toda una vida hecha…….” “No me quiero arriesgar todavía…………………” (Es mi caso), en fin, son innumerables los argumentos y todas muy razonables.

Sobre todo no debemos ser demasiado exigentes con este nuevo gobierno, fueron más de 60 años de relajo total, arreglar la casa va a llevar mucho tiempo, hasta que todo esté en orden y en condiciones de recibir a todos los compatriotas que estamos afuera y hemos migrado en forma involuntaria, quienes somos los que mas sufrimos este destierro, por de pronto urge que se le dé prioridad a los que están en forma irregular en los países del continente, son los que más sufren, pues no se les pagan lo que corresponde, ni tienen ninguna asistencia social, en fin están abandonados. O sea que el nuevo gobierno debe abogar por estos compatriotas.